jueves, 10 de junio de 2010

Las armas parlantes


Una de las particularidades de la heráldica catalana es la abundancia de lo que denominamos armas parlantes.

Las armas parlantes son las que incorporan piezas o muebles que representan directamente al titular del escudo. Normalmente un linaje o un topónimo.

En la heráldica catalana, tanto la gentilicia como en la toponímica encontramos innumerables ejemplos de armas parlantes.

Las armas gentilicias con aquellas que representan a linajes, en contraposición de las toponímicas que son las que representan lugares. Puede haber casos en que ambas coincidan, ya que las armas del señor del lugar se territorializaron, tal y como ocurrió con las armas de los condes de Barcelona o a la inversa, que el señor adopte las armas del lugar sobre el que ejerce su jurisdicción.

Como ejemplos de armas parlantes gentilicias encontramos el linaje Cabrera, de oro, una cabra pasante de sable. Bordura de piezas de sable;



el linaje Cardona, de gules tres matas de tres cardos de oro cada una;



los Despujol, en campo de gules un monte flordelisado de oro con bordura jaquelada de gules y oro (en catalán, "pujol" significa colina);



o las armas propias de mi linaje, el Cruïlles, en castellano cruce, entendido como encrucijada de caminos, trae un campo de gules, sembrado de crucetas de plata,


entre otros muchos.

Como armas toponímicas encontramos, entre centenares de ejemplos, en la provincia de Barcelona, las de Torroelles de Llobregat, escudo losanjado de oro, tres torres de azur abiertas, mazonadas de sable, por timbre, una corona mural de pueblo;


Cervelló, escudo losanjado de oro, un ciervo de azur. Por timbre, una corona de barón;


o Lliça de Vall, escudo losanjado de plata, dos lisas de azur nadando, contornadas puestas en palo. Por timbre una corona mural de pueblo.


En la provincia de Gerona, Cantallops, escudo losanjado de oro, un lobo de sable ("llop" en catalán es lobo). Por timbre una corona mural de pueblo;


Palau-saverdera, losanjado de oro, un palacio abierto de sinople mazonado de sable ("palau" significa palacio). Por timbre una corona mural de pueblo ;


o Corçà, escudo losanjado de oro, un corazón de gules (corazón en catalán es "cor"). Por timbre, una corona mural de villa.


En la de Lérida encontramos Cervera, escudo losanjado cuartelado en sotuer, primero y cuarto de plata, un ciervo de gules, segundo y tercero de oro cuatro palos de gules (ciervo en catalán es "cérvol"). Por timbre una corona de conde;


La Floresta, losanjado de plata, una rama con hojas de sinople y tres flores de gules botonadas de oro. Por timbre una corona mural de pueblo;


o Abella de la Conca, de sable, una abeja volando de oro (abeja en catalán es "abella"). Por timbre una corona de barón.


En la provincia de Tarragona, Corbera d’Ebre, escudo losanjado de plata, un cuervo de sable acompañado en la punta por una faja ondada de azur (cuervo es "corb" en catalán). Por timbre, una corona mural de villa;


Ulldemolins, escudo losanjado de oro una muela de molino cargada con un ojo de plata con el iris de sable, el jefe de sable (en catalán "ull" significa ojo, y "molí" es molino). Por timbre una corona mural de pueblo;


o Riudacanyes, cinco cañas de sinople sobre un pie de sinople con una faja ondada de azur fileteada de plata ("riu" en catalán significa rio y "canya" es caña). Acolado al escudo un bordón de prior y por timbre una corona de barón.



Huelga decir que, en Cataluña, los escudos municipales deben ser losanjados en ángulo de 90 grados. Esto es un cuadrado apoyado sobre uno de sus vértices.