lunes, 14 de febrero de 2011

Heráldica fraudulenta

No solo la genealogía o la nobiliaria son víctimas del fraude. También lo es la heráldica, pero de distinta manera.


En la genealogía y la nobiliaria, el fraude va dirigido –normalmente- al engrandecimiento del ego. En cambio, en la heráldica, lo que busca es también el engrandecimiento, pero de la cuenta corriente de algunos listillos.


Existen en la red multitud de páginas en las que, por un módico precio, le ofrecen al incauto internauta el escudo de su APELLIDO (!) y enviárselo a su domicilio listo para enmarcar, a todo color y sobre soporte papel pero con apariencia de pergamino. Además de un detallado estudio genealógico del apellido con el que poder armar un fabuloso arbol. Todo listo para colgarlo en el salón, encima de la chimenea. Y si se prefiere pintado sobre baldosas o labrado en piedra para colocarlo en la puerta de casa a modo de castillo medieval, por un poco más de dinero también lo hacen. Todo a gusto del primo. Perdón, del cliente.


Muchas de estas webs buscan dar una imagen de solvencia académica haciéndose pasar por asociaciones de historiadores y estudiosos de la heráldica. No obstante, no son más que empresas en toda regla que buscan el dinero fácil gracias a la ignorancia de la mayoría en estos temas.


Pero se delatan ya en la primera línea. Como todo aficionado, por muy amateur que sea, sabe, no existen los escudos de apellidos. Sí de linajes o familias, pero no de apellidos.


Como es lógico, no todas aquellas personas que comparten apellido están relacionadas. Así, no todos los Fernández, García, Vidal o Camps (por citar solo algunos) son parientes. Y como no son parientes, no son familia, y, por lo tanto, no pueden tener el mismo escudo. Lo que hacen estas empresas es, cuando algún Sr. García les dice que quiere un escudo, cogen el de unos García de vaya usted a saber donde y se lo colocan al pobre cliente que, de buena fe, cree que es el suyo y, quizás, lo cuelgue en un lugar preeminente en su casa e incluso le llegue a coger cariño, sin saber, que lo que tiene, no es más que el símbolo de un timo. No de un linaje.


Así que si usted, querido lector, a comprado un escudo a través de una página web, mercadillo medieval o evento similar, probablemente, no sea el suyo. Será el de alguien que se apellida como usted pero que nada tiene que ver con su familia.


Para determinar el escudo de su linaje, si es que lo tiene, deberá hacer una investigación genealógica hasta llegar a aquel miembro de su familia que, efectivamente, ostentó armas y probar, fehacientemente, que desciende, por línea agnaticia, de él. Como esto es complicado, le recomiendo, querido lector, que acuda a alguno de los cronistas-reyes de armas que hay en España y le pida que diseñe y certifique sus armas. Es la única manera de dejar constancia de la vinculación perpetua entre ese escudo y su linaje.


Recuerde que, como el escudo que tiene en la pared no es el suyo, ha incurrido en una usurpación de blasón. Hecho, hasta hace poco, tipificado como delito en el Código Penal y similar al de suplantación de identidad. Hoy en día ya no es delito, pero seguro que no querrá tener, como símbolo de su linaje, algo que nada tiene que ver con él.


Hay que tener en cuanta también que, al contrario de lo que ocurría en Castilla, en Cataluña -hasta que se demuestre lo contrario- solo las familias nobles tenían escudo. Y son muy pocas.


En conclusión: aquellos que 1) hayan adquirido un escudo por alguno de los medios anteriormente citados; 2) tengan un escudo pero que no puedan demostrar que es el de su linaje, y 3) que no tengan escudo; lo más recomendable es, como se ha dicho antes, acudir a un cronista-rey de armas para dotarse de escudo para él y sus descendientes.


Obviamente, quien quiera seguir manteniendo como propio ese escudo que compró en aquella excursión a ese pueblecito medieval el año pasado, puede seguir haciéndolo, pero debe saber que no tiene nada que ver con él, que está utilizando el símbolo de otra familia y que ni el tiempo ni el uso le legitimarán para convertirlo en propio. Ya no es un delito pero sin duda es algo moralmente, como mínimo, cuestionable.



Algunas empresas dedicadas a la heráldica de APELLIDOS (!):

HERÀLDICA CATALANA (no tiene nada que ver con este blog)
ARALDIS
HERÁLDICA
HERÁLDICA DE APELLIDOS
HERÁLDICA Y GENEALOGÍA
GABINETE HERÁLDICO
ARCHIVO HISTÓRICO DE BLASONES Y LINAJES