jueves, 16 de septiembre de 2010

La Grandeza de España


La Grandeza de España es la más alta dignidad nobiliaria española, inmediatamente inferior a la de Infante de España y antes de los Títulos de Reino.

La denominación “grande”, empezó a utilizarse en Castilla hacia el siglo XIII para referirse a los Ricos-Hombres, término que cayo en desuso.

Con el rey Juan II empezó a hablarse de los Grandes del Reino para referirse a los vasallos inmediatos del rey, que eran los sucesores de los Ricos-Hombres y que asistían a la Corte por derecho propio, como cabezas visibles de la más alta nobleza.

En un primer momento existieron tres categorías (primera, segunda y tercera) que se diferenciaban en la manera de dirigirse al Rey y cubrirse ante el en el acto de la cobertura, aunque en el siglo XIX se redujeron a una sola. También en el siglo XIX se estableció que todos los Duques fueran Grandes de España.

A los Grandes se les considera primos del Rey, mientas que al resto de los Títulos se les considera parientes.

Tienen derecho al uso de corona y manto de Grande en sus escudos.

Algunos de los privilegios que tenían eran: ser miembros natos del Senado; el tratamiento de Excelencia; ser invitados a todos los actos de la Corona y de la Familia Real por escrito; no ir a la guerra sino con la categoría de Jefes y sueldo de Generales; no poder ser apresados sino por una cédula especial del Rey; cubrirse la cabeza ante el rey; tener acceso libre hasta la Galería de Retratos, dos estancias antes de la Regia Cámara y recibir honores militares. Además tenían derecho a sentarse en un banco preferente en la Real Capilla.

El último privilegio del que gozaron, hasta 1984, era la posesión de pasaporte diplomático, ya que de forma histórica, eran representantes de la Corona. Este documento era similar al resto de pasaportes diplomáticos, a excepción de su preámbulo, en el que el Ministro de Asuntos Exteriores en nombre del rey, señalizaba la concesión de transitar libremente por el país, pidiendo a los países extranjeros que no le pusiesen inconvenientes en sus viajes y lo ayudasen en lo que necesitase por corresponder al bien del servicio nacional.