- Un vecino de la Sagrera lo pone junto al nombre de la vía.
- La mayoría los pinta él mismo.
- El diez años ha colocado cerca de 400.
La Sagrera puede presumir de ser el único barrio de Barcelona en el que el escudo original de la capital catalana luce en las placas de casi todas sus calles. Es gracias a un vecino. Desde hace 10 años, Enric, zapatero, los ha pegado. Ha puesto cerca de 400, algunos pintados meticulosamente por él y otros comprados.
Esta es su forma de agradecer a sus convecinos el apoyo recibido durante «los más de 30 años que llevo viviendo aquí», explicaba a 20 minutos orgulloso, mientras señalaba algunos de sus emblemas. Y también, de paso, «reivindicar la memoria histórica de Barcelona, su escudo verdadero». El interés de Enric por el icono surgió un poco por casualidad, a raíz de la aprobación de la nueva bandera de la ciudad y la polémica que suscitó.
A él, además, le despertó la curiosidad heráldica. Corría el año 1996 y acudió a una biblioteca para buscar documentación. Allí le recomendaron el libro "El veritable escut de la ciutat de Barcelona. Origen, història i errors d'abans i ara" (El verdadero escudo de la ciudad de Barcelona. Origen, historia y errores de antes i de ahora), de Manuel Bassa i Armengol. Más adelante se lo acabó comprando. Éste, y muchos más. Ahora se puede decir que es todo un entendido.
Enric coloca los escudos solo. «He puesto cinco en un día», asegura. Pero a veces recibe la ayuda de algún vecino. «Me prestan una escalera más alta o lo ponen ellos», dice. Y explica, entre risas, que durante este decenio colocando emblemas ha vivido «muchas experiencias». Una vez la Guàrdia Urbana le preguntó qué hacía. «Arreglar el escudo para que quede bien», les respondió. Y los agentes le dejaron seguir con su embellecedora cruzada.